Pruebas “sólidas y consistentes”; el Coronavirus se transmite por el aire
Un grupo de investigadores dio a conocer a través de la Revista The Lancet, que existe evidencia “sólida y consistente” de que el virus SARS-CoV-2, que causa la COVID-19, se transmite predominantemente a través del aire. Esto significa que, ya no sólo es pensar en lavarnos las manos frecuentemente y mantener dos metros de distancia, sino que además es importante tener en cuenta el aire que estamos respirando porque alguien puede potencialmente infectarse cuando inhala los aerosoles.
Los aerosoles son pequeñas partículas, sólidas o líquidas, de tamaño inferior a 100 micras que se quedan flotando en el aire por cierto tiempo, de minutos a horas, dependiendo de diferentes factores y que si contienen coronavirus, al ser inhalados, producen el contagio. Si un virus infeccioso se transmite principalmente por el aire, alguien puede infectarse al inhalar estos aerosoles que se producen cuando una persona infectada exhala, habla, grita, canta o estornuda. Por lo tanto, las medidas de control aerotransportado deben incluir: ventilación, filtración de aire, reducción de la aglomeración y la cantidad de tiempo que la gente pasa en un espacio interior, el uso de máscaras siempre que estén en el interior (incluso si no están a 6 pies o 2 metros de los demás), atención a la calidad y ajuste de la máscara, y un grado superior EPI (Equipo de Protección Individual) para el personal sanitario y de otro tipo cuando se trabaja en contacto con personas potencialmente infecciosas.
Aunque otras vías de contagio también «pueden contribuir», el equipo de investigadores sugiere que la transmisión aérea es la dominante, y expone diez evidencias que apoyan esta hipótesis:
- Eventos de súper propagación, como el brote del coro de Skagit Valley, en el Estado de Washington hace un año, en el que 53 personas se infectaron a partir de un solo caso infectado. «La alta incidencia de tales eventos sugiere fuertemente el predominio de la transmisión por aerosoles».
- Transmisión del virus «entre personas en habitaciones adyacentes, pero nunca en presencia uno del otro», como se ha observado en hoteles de cuarentena.
- La transmisión asintomática o presintomática del coronavirus de personas que «no tosen ni estornudan» representa al menos un tercio, y quizás hasta el 59%, de toda la transmisión a nivel mundial. Las personas enfermas solo necesitan hablar para contagiar.
- La transmisión «es mayor en interiores que en exteriores, y se reduce sustancialmente con la ventilación interior».
- Se han documentado infecciones en organizaciones de la salud donde se han aplicado estrictas precauciones contra la exposición a las gotas pero no a los aerosoles.
- Se ha detectado SARS-CoV-2 viable en el aire, apuntan los autores, que recuerdan cómo en experimentos de laboratorio el virus permaneció infeccioso en el aire hasta 3 horas.
- Se ha detectado el virus en filtros de aire y conductos de edificios en hospitales con pacientes con Covid-19, adonde solo pudo llegar «mediante aerosoles».
- Se han realizado estudios, en los que participaron animales enjaulados infectados, que se conectaron a animales no infectados, enjaulados por separado, a través de un conducto de aire, y que han demostrado que la transmisión del coronavirus «solo puede explicarse adecuadamente mediante aerosoles».
- Ningún estudio ha proporcionado pruebas sólidas o consistentes para refutar la hipótesis de la transmisión aérea del SARS-CoV-2.
- «Hay evidencia limitada» para apoyar otras vías de transmisión dominantes.
Los primeros meses de la pandemia del coronavirus fueron de incertidumbre sobre el modo de contagio. Pensando que era como el de la gripe (por gotas gruesas de secreciones despedidas al toser o estornudar), se aconsejó que solo personas con síntomas usaran mascarillas. También se pensó, que al igual que la gripe, su contagio podía ser por tocar superficies contaminadas y se aconsejó la desinfección completa de superficies, e incluso la ropa de uso diario y hasta los zapatos.
Según este estudio publicado en The Lancet, la principal ruta de contagio es la vía respiratoria, a través de los microscópicos aerosoles que se forman al hablar, cantar o gritar, y la contribución del contagio por contacto con superficies contaminadas es mucho menor de lo que se pensaba. Con esta nueva información, nuestras actividades diarias deben estar destinadas a disminuir la probabilidad de contagio por aerosoles, usando doble mascarilla, evitando aglomeraciones en espacios cerrados sin ventilación por más de 15 minutos y evitando compartir espacios cerrados con gente que no vive en el mismo hogar.
Ramona Ávila Núñez, PhD
Referencia:
Trisha Greenhalgh, Jose L Jimenez, Kimberly A Prather, Zeynep Tufekci, David Fisman, Robert Schooley. Ten scientific reasons in support of airborne transmission of SARS-CoV-2. The Lancet (2021). Published: April 15, 2021 DOI:https://doi.org/10.1016/S0140-6736(21)00869-2